Esta mañana me despertó un tenue sonido, pero no pude precisar qué era o de dónde venia. Era un sonido familiar, que he escuchado en otros momentos de mi vida. Al escuchar con mas atención, recordé que era un sonido que me rodeó con frecuencia en la niñez. Después de unos minutos me di cuenta de que lo que estaba escuchando eran las olas del mar estrellándose contra la playa. Crecí en el país de Panamá, donde nunca estuve lejos del estruendo de las olas. De hecho, por varios años vivimos a solo un tiro de piedra del océano. Así que esta mañana me levante y abrí la ventana para que el sonido de las olas se pudiera escuchar aun mas poderoso. La persistencia y el poder de este sonido de olas rompiéndose contra la playa es un sonido muy sosegador para mi. Al estar aquí en la playa de Florida con mi familia, insomne a las 5 de la mañana, estoy también meditando en la manera en que Dios se revela a cada uno de nosotros. Dios nos ha creado y a través del resto de su creación de revela a sí mismo. Con frecuencia no reconocemos Su voz o no sabemos de donde viene, pero Dios siempre está buscándonos y mostrándose a nosotros. Reflexionar en esto me hace recordar que la paz que viene de conocer a Dios está presente de manera poderosa y persistente en este mundo y en mi vida. Puedo confiar en que Dios está cumpliendo Su buen propósito para mi vida y que El cumplirá su propósito final en este mundo.
Esta semana nos venimos a la playa para disfrutar de un tiempo de estar juntos en familia, pero quiero invitarlos a que eleven sus oraciones por nuestros queridos amigos en Birmingham. Desde que regresamos a vivir a Birmingham hace dos anos hemos tendido el privilegio de caminar de cerca con dos familias en especial (los Davis y los Souders), amigos que Dios puso en nuestro camino allá por mediados de los noventas cuando todos entrábamos a la adultez y a la vida matrimonial. Con toda intención nos hemos estado reuniendo como “grupo pequeño” a través de la iglesia de Brook Hills para juntos compartir, demostrar y ensenar la Palabra de Dios mientras buscamos también juntos, servir al mundo.
Hace casi un año y medio, Sterling Davis de 6 años y el mayor de cuatro niños fue diagnosticado con un tumor cerebral. Nuestra familia ha sido tanto retada como fortalecida al caminar en nuestro “grupo pequeño” con la familia Davis en su propia jornada y observar como declaran y demuestran una fe Bíblica cuando han tenido que caminar a través de la continuas dificultades de las convulsiones, efectos secundarios de los medicamentos, complicaciones con la aseguradora, decisiones medicas muy complejas y tres cirugías de cerebro. Esta semana, Sterling esta de vuelta en el hospital pasando por una serie de estudios con el objeto de precisar con mayor exactitud donde se están originando sus convulsiones en preparación para una cuarta cirugía. Me gustaría animarlos a que visiten su pagina Web en http://sterlingdavis.wordpress.com y oren por la familia Davis esta semana.